martes, 1 de agosto de 1563
Carta de Felipe II á su hermana Gobernadora de los Paises Bajos.
Madrid, 10 de agosto de 1563.
Elogia el celo de su hermana en el gobierno de los Países Bajos. Ida proyectada del Conde de Egmont cerca de Felipe II para infor marle de las cosas de Flandes—Inconveniente de las juntas -Juramento de los burgueses - Condueta del Marqués de Derges—Encarga Felipe II que se procure un acomodamiento entre los descontentos y el Cardenal Granvela—Avisa la tentativa que habian hecho sus galeras contra el Peñon de Velez, y que despachaba á los de Amberes á quienes habia dicho que por entonces no se hiciese innovacion en lo de los obispados.
A LA DUQUESA DE PARMA DE MI MANO.
Habrá tres ó cuatro dias que recibi la carta de vuestra mano de 14 de julio, que medió Gonzalo Perez, y holgué con ella como suelo con todas las que me traen nuevas de vuestra salud, y señaladamente viendo cada hora mas el cuidado, amor y vigilancia conque mirais por las cosas desos Estados no perdonando á ningun trabajo ni fatiga de los que se os recrescen en ello, que bien veo yo que son mayores que acá se me pueden representar; y no hay para que daros nuevas gracias por ello, pues vos lo haceis por quien sois y por lo que me amais, y yo sé bien que lo debeis al amor que os tengo.
Y aunque para responderos á lo que me escribis, he estado por esperar á que llegue el ordinario ó Armenteros (1) que decis me habiades de despachar, todavia ofresciéndose este correo que mando ir á Trento, no he querido que vaya sin estos ringlones (2) para avisaros del recibo de vuestra carta, y tambien por satisfacer á dos ó tres puntos que tratais en ella, dejando de hacerlo mas cumplidamente para cuando lleguen vuestras cartas.
He visto lo que pasastes con el Conde Degmont sobre su venida y la instancia que le hicistes para que no la rehusase, y que trujese cargo de darme cuenta de las cosas de esos Estados como tan informado dellas, y es asi como vos se lo dijistes y pienso que no lo rehusará si los demas no lo rebotan; y aunque es de muy mala consecuencia y inconveniente á nuestra autoridad que se hagan juntas por nuestros vasallos sino es por nuestra órden y mandado ó por la vuestra, todavia hicistes bien en acordalles que se juntasen ahi antes que en otra parte por las causas que escribis y porque les podais mirar á las manos, y encargar lo que toca á mi servicio como decis que lo hicistes, que me paresció muy conveniente y á propósito; y asi tengo por cierto que se haurá resuelto como conviene y vos hauréis continuado con ellos este oficio, y de lo que hubiere seguidose dello me hauréis avisado juntamente con vuestro parescer, el cual holgaré yo mucho de tener, particularmente en esto como en todo lo de más, como de quien tan bien lo tiene entendido.
Tambien he visto lo que se ha platicado sobre el remedio de las cosas de Tornay y Valencianes, y hamo contentado mucho el medio que se ha acordado del juramento que han de hacer los burgueses de la profesion de su fee, con que se procure de llevar á debida ejecucion, porque ningun otro medio paresce que seria tan á propósito ; y asi os ruego cuanto puedo que si no estuviese efectuado en la una parte y en la otra cuando esta llegase, lo que no puedo creer, se efectuo luego porque no nazca algun estorbo de la dilacion: y he holgado mucho que el Marqués de Berges haya estado tambien en esto y tengais tanta satisfaccion de la manera que lo abrazó y ayudó de su parte, y si me avisais que lo continúa yo le escribiré con el primero (correo) como os paresce; dándole las gracias dello y animándole á que lo continúe como lo debe.
Bien me paresció lo que propusistes al Conde Degmont y á los otros sobre si se hallaria forma de acomodar lo del Cardenal de Granvela, y aunque respondieron fuera de lo que quisiéramos, todavia no debeis dejar de hacer el mismo oficio con ellos, aparte con cada uno, ó como mejor os paresciere, que podria ser que se les abriesen los ojos, que les tiene ciega la pasion, y viesen la poca razon con que se mueven á lo que contra él hacen, y á lo menos veráse mas su intencion para proveer á ello como conviniere.
Estando escrihiendo esta me ha llegado nueva que mis galeras que habian ido á tentar si pudieran cobrar el Peñon de Velez por ser cosa que fué otros tiempos destos reinos, y de importancia por estar en el estrecho, hallaron que estaba tan apercibido y fortificado que determinaron de no tomarle, y asi dieron sobre el lugar de Velez y le tomaron, saquearon y quemaron, y se volvieron á Málaga, y de alli atender á lo que mas convenga hacer; de lo cual os he querido avisar porque sepais lo que pasa como es razon.
A los de Amberes he mandado despachar y se partirán luego con el despacho, y vereis por la carta que se os escribe en francés, y copia que se os enviará della. llame parescido respondelles que por agora se esté asi lo del obispado, y adelante verémos lo que mas converná hacer.
Archivo de Simancas—Estado—Núm. 525)
(1) Armenteros era secretario de la hermana de Felipe II, Gobernadora de los Paises Bajos.
(2) Asi el original.
Fuentes
Colección de Documentos Inéditos para la Historia de España
D. Martin Fernández Navarrete, D. Miguel Salva, D. Pedro Sainz de Baranda,
Individuos de la Academia de la Historia.
Tomo IV.
Madrid: Imprenta de la Viuda de Calero, 1844.